¿Te has llegado a imaginar cómo sería tu situación si perdieras tus facultades totales o parciales de autonomía por un accidente o una enfermedad y dejarás de poder hacer las cosas más cotidianas que habitualmente haces?.
Para todas estas situaciones es cuando es de ayuda contar con un seguro de ayuda a la dependencia.
Cubrirá los siguientes grados de dependencia:
Dependencia Severa
Se considera que el Asegurado se encuentra en estado de Dependencia Severa cuando necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria dos o tres veces al día, pero no quiere el apoyo permanente de un cuidador o tiene necesidades de apoyo extenso para su autonomía personal. Se corresponde con una puntuación final del Baremo de Valoración de la Dependencia de 50 a 74 puntos.
Gran dependencia
Se considera que el Asegurado se encuentra en estado de Gran Dependencia cuando necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria varias veces al día y, por su pérdida total de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, necesita el apoyo indispensable y continuo de otra persona o tiene necesidades de apoyo generalizado para su autonomía personal. Se corresponde con una puntuación final del Baremo de Valoración de la Dependencia de 75 a 100 puntos.
Tendrá unos Servicios adicionales gratuitos
Asesoramiento Fiscal telefónico relativo a cuestiones relacionadas con la tributación del presente seguro, que le puedan surgir al Asegurado así como a los miembros de su familia. Asesoramiento Jurídico telefónico sobre los conflictos que le puedan sobrevenir al Asegurado y los miembros de su familia en relación con el ámbito de la vida familiar cotidiana.
Con unas importantes Ventajas fiscales
Podrán reducirse en la base imponible general del IRPF las primas satisfechas a los seguros privados que cubren exclusivamente el riesgo de dependencia severa o gran dependencia según la legislación vigente en cada momento


